sábado, 6 de febrero de 2016

Libertad y libertinaje

Mientras que Cádiz se divertía a lo grande esta pasada madrugada con las genialidades y puyas de su final del Concurso de Coros, Cuartetos, Comparsas y Chirigotas, en Madrid pasaban la noche en el calabozo unos titiriteros detenidos por la escandalera montada durante una actuación contratada por el Ayuntamiento y dirigida a niños. En el transcurso del espectáculo los miembros de la compañía 'Títeres desde Abajo" representaron escenas tétricas como el ahorcamiento de una monja y un juez, la agresión a una embarazada y la exhibición de una pancarta alusiva a la banda terrorista ETA.

Es la diferencia entre libertad y libertinaje. En Cádiz se trabajan durante un año la participación en el Gran Teatro Falla y consiguen, edición tras edición, superarse a sí mismos en ingenio y buen gusto no exento de ironía y leña a diestro y siniestro, arriba y abajo, siempre en un pleno ejercicio de libertad. Hay otros "artistas" que, sin embargo, carecen de escrúpulos para exhibir en Madrid o donde sea la bajeza de sus instintos y proclamarla ante un auditorio tan sensible como es el público infantil en una obscena exhibición de libertinaje.


En España no hay censura, pero sí hay unas leyes que respetar sustentadas en unos elementales principios morales. El Ayuntamiento de Madrid contrató a una compañía de títeres que ha resultado ser una cloaca. Es obvio que los responsables culturales de semejante contratación deben dar inmediatas explicaciones antes de irse a su casa.


En la foto, José Luís García Cossío, "Selu", que al frente de su chirigota "Si me pongo pesao me lo dices" ganó el Concurso gaditano de este 2016 con una genial puesta en escena.