Mañana se inicia el juicio sobre el "Caso Marea" o "Caso Riopedre" en el que están acusados varios responsables autonómicos y locales, además de empresarios, por operaciones presuntamente delictivas con los presupuestos dedicados a la educación pública de Asturias. El cargo más relevante que se sentará en el banquillo es José Luís Iglesias Riopedre, que fue Consejero de Educación con los gobiernos socialistas presididos por Alvarez Areces.
Como persona y como político me asquea la corrupción. Tampoco me gusta que una instrucción judicial se demore cinco años o más porque considero que los acusados deberían poder exponer los argumentos en su defensa. Desde 2011 hemos leido paginas y páginas de informaciones relativas al modus operandi de quienes mañana comparecerán ante el Tribunal. Sospecho que el Gobierno Autonómico socialista -que ejerce de acusación particular- habrá puesto un sinfín de obstáculos para que los asturianos conozcamos la verdad de los hechos.
Por cierto, como dije en el Debate de Investidura de Pedro Sánchez, la Cordillera Cantábrica continúa actuando de telón para los medios informativos nacionales. Ni una palabra en la prensa nacional de hoy.
